Enrique Badía escribe sobre las dificultades de los jovenes para conseguir una vivienda. No siempre se trata de comprar, claro: se puede alquilar, o se debería poder. “Es precisamente en esa franja de la sociedad donde se echa más en falta la alternativa que supondría disponer de un auténtico mercado de alquiler, ya fuera como paso previo a la compra o a modo de opción más ajustada a las circunstancias o los deseos de una parte relevante de la población; entre la que, por ejemplo, habría que incluir a quienes, por unas u otras razones, se ven impelidos a considerar la posibilidad de cambiar de residencia con cierta periodicidad. Es sabido que los índices de fijación al territorio son más altos en España que en el resto de países de la Unión Europea y, aunque existan otras razones, no cabe ninguna duda de que la carencia de oferta asequible de pisos en régimen de arrendamiento es un dato fundamental.”
Silencios sobre la vivienda.
2003-10-20 02:58 El problema con el alquiler es la legislación; se pone tan de parte del alquilado que es un riesgo enorme alquilar. De modo que, en la práctica, se han formado dos mercados: uno carísimo y otro bastante barato pero sólo para gente de confianza del propietario. Ciertamente habría que reformar esa ley. El PP recientemente hizo una reforma mínima que reducía el tiempo que se peude tardar en echar a un inquilino, pero era una cosa ridícula, a todas luces insuficiente.