Dice
Primo González: “El Estado pedigüeño que había descrito en sus tiempos el entonces líder de la oposición José María Aznar está dejando de ser una realidad para, de forma gradual, convertirse en un país en mayoría de edad económica que mira con cierto aire de próxima igualdad a algunos de los socios de la UE”. Y ello viene a cuenta de que la ampliación gradual de la UE, provocará una reducción de los miles de millones de euros que hasta ahora han venido de los Fondos de Cohesión y de los Fondos Estructurales Europeos. Toda un reto el demostrar esa mayoría de edad; ¿quiere decir que cuando estos fondos dejen de entrar, la gente que trabaja en su gestión y desarrollo no acabará engrosando las cifras de desempleo? ¿que los niveles de renta no variarán? ¿que los desequilibrios estructurales se reducirán?. Ante la certeza de que
El cheque de la UE adelgaza urge comprobar cuál ha sido el impacto real de las inversiones realizadas estos años. ¿España seguirá inviertiendo en I+D aunque ya no haya estímulo europeo?. Lo dicho, todo un reto.