En
Patentar el aire Alberto García Quesada critica duramente la propuesta sobre directiva de patentes que se votará en breve en Bruselas y que al parecer permitirá patentar conceptos e ideas: “Si antes pagabas por montar un chiringuito, ahora pagarias además por pensar en tener un chiringuito, y si es en la playa ni te cuento. Si yo quiero desarrollar un editor de texto debería pagar a quien se le haya ocurrido antes el concepto de editor de texto. Pero lo que podría pasar por una argucia más de los neoliberales, por vendernos el aire que respiramos, plantea situaciones tragicomicas, que rayan la ciencia ficcion. Nada nuevo en realidad, aunque seguro que ellos no han pagado por pensarlo.” Tambén
David de Ugarte aborda el tema —aunque desde una perspectiva más técnica y política— en
Unión Européa: al dictado de Microsoft.