Natalio R. Botana escribe sobre lo que está ocurriendo ahora en Argentina con lo de los acusados de torturas y otros crímenes del régimen militar de los años setenta. “Uno de los aspectos más oscuros de aquella historia es la lucha de memorias con pretensiones dominantes. ¿A qué imagen redentora pertenece, en efecto, dicho pasado? ¿A los “jóvenes soñadores e idealistas” que combatieron la opresión o a los defensores del orden y “del estilo de vida de los argentinos”? Siempre hemos escuchado esas campanas que, al repicar a duelo por los caídos, activan una memoria dispuesta a capturar, para ella sola, las claves del presente. No hay, pues, un pasado digno de ser reconstruido con todos sus matices, con sus hallazgos y sus olvidos, sino un combate entre pasados diferentes, blindados, si se quiere, con la argamasa de la hosquedad y el resentimiento.”
El blindaje del pasado.