Josep Borrel analiza el cúmulo de despropósitos y problemas que afronta Estados Unidos en Iraq, desde el coste económico, al político y humano, pasando por el fantasmagórico envío de tropas españolas, casi las únicas en el mundo que han aceptado ir a meterse en la boca del lobo, sin preparación y sin permiso del congreso.
España en Iraq: “Como alternativa, se abre camino la idea de una nueva resolución de la ONU que defina un mandato amplio y preciso para la organización internacional sacándola del papel marginal que le asignó la 1483, votada inmediatamente después de la victoria americana.
La idea no puede seducir a Bush pero habrá tenido que considerarla con Blair durante su visita de la pasada semana aprovechada para esperar que la Historia les absuelva de sus piadosas mentiras sobre las armas de destrucción masiva.”