Pablo Sebastián: “Estando así las cosas, y a sabiendas del duro enfrentamiento entre Berlusconi y el presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, al que Il Cavaliere ha querido implicar en sus escándalos, se podía esperar la máxima prudencia del jefe del Gobierno azurro en su presentación oficial en la UE que comenzó por el Parlamento Europeo. Pero Berlusconi no supo resistir la tentación de desafiar a la Cámara y de insultar a un diputado al que vino a llamar nazi, después de descalificar a otros muchos a los que dijo que estaban “de turistas” en el Parlamento porque no conocían la realidad italiana.” Esta, la de Berlusconi, parece el tipo de reacción suscitada por el miedo. O por la vergüenza. Seguramente sabe que en Europa no se tiene muy buena opinión de él y ha decidido salir atacando, como un boxeador que va perdiendo a los puntos.
El Padrino Berlusconi.