Sobre las privatizaciones con amiguitos y las interferencias del Gobierno en la fusión de empresas.
Juan Manuel Eguiagaray: “Resulta proverbial que la sustitución de monopolios públicos por cuasi monopolios privados haya ido seguida de tan escaso impulso en favor de estructuras más competitivas en prácticamente todos los sectores afectados… Las decisiones del Gobierno revelan una preocupación por dos cosas principalmente: la utilización de su poder político en la búsqueda y mantenimiento de apoyos económicos y la convicción de que el poder económico es la base de la competencia en la sociedad en que vivimos.” Esto último tiene un resultado negativo: que se prima la fuerza en vez de la astucia. Eso es como si Odiseo ocupara el lugar de Aquiles en la lucha contra Hector.
Contra (algunos) campeones nacionales.