“La estupidez de cada ser humano es, en sí misma, un problema preocupante. Pero el cuadro cambia cuando se trata de la estupidez de personas que tienen poder: es decir posibilidades de control sobre el destino de otras personas”. Giancarlo Livraghi avanza en su reflexión sobre la estupidez y el poder, y lo hace desde la premisa y el saber que “las personas en el poder tienen más poder que las otras personas”. Parace una obviedad, pero no, ya que si bien existen personas aparentemente poderosas, éstas resultan ser menos influyentes que otras aparentemente no visibles, que pululan por alguno de los anillos de poder. La estupidez del poder es la tercera entrega de El poder de la Estupidez (la primera y la segunda también están accesibles) y plantea entre otras cosas, lo que sería un eficaz antídoto contra la estupidez del poder: “la capacidad, que algunas personas tienen, de hacer funcionar las cosas sin colocarse en un rol de poder.