Comentarios

1. Jaime
   2003-06-13 13:03 Y no sólo parecían saberlo los altos cargos del PP: ayer escuché en la radio que, al parecer, el viernes por la noche en Antena 3 ya estaban buscando imágenes de archivo de Tamayo.
2. Marcos
   2003-06-13 19:00 El problema es cómo evolucionará todo esto. La verdad es maleable y, lo peor, interpretable, así que cada cuál lo explicará a su modo. A mí me gustaría sacar dos conclusiones de todo esto: 1. Que sólo el PSOE podrá salir razonablemente airoso (no pienso en términos de poder, sino de valor democrático) si hace una limpieza profunda, empezando por la asunción de responsabilidades de algún que otro alto cargo, Blanco por ejemplo. Demostraría que ellos SÍ saben asumir sus errores y enmendarlos. 2. Que la democracia sólo podrá regenerarse desde una amplia y seria depuración de todas las corruptelas e intereses que crea la política; empezando desde los alcaldes y acabando por el Presidente. Todos conocemos o sufrimos casos de Alcaldes o concejales corruptos o de comportamientos caciquiles que nadie de su partido evita o corrige… Da pánico pensar no ya que el PP esté detrás de esto, sino el simple hecho de que la decisión de determinados asuntos urbanísticos en una ciudad esté supeditada no al interés del ciudadano sino al lucro personal de unos pocos. Ahora, más que nunca, se necesita una democracia participativa en la que el Estado sea una construcción de todos y los representantes políticos no sean nada más (y nada menos) que los ejecutores de la voluntad de los ciudadanos. Saludos, Marcos.
3. bacterio
   2003-06-14 04:04 Hace ya unos años se rumoreaba en Zaragoza que el presidente de una caja de ahorros había sobornado a un parlamentario del PP de las Cortes de Aragón, para que apoyara a los socialistas, y estos a cambio del tránsfuga, habían prolongado el mandato de este fulano (el la caja de ahorros) El caso éste es similar. Me parece que los problemas son dos: Uno, que los candidatos son elegidos por el partido, y no por las bases o los ciudadanos, con lo cual los políticos no deben su carrera a hacer lo que puedan por sus electores, sino al que le ha nombrado. El otro, es que las regulaciones sobre el suelo y la edificación en España, hacen que el suelo edificable sea en muchos casos y de forma artificial un bien escaso que regulan unos cuantos políticos. Debe de ser una tentación terrible lo de recalificar un suelo a cambio de una ayudita al partido o a sí mismos. Un corolario de esto, es que los precios de las casas son altos gracias a las leyes del suelo, y la gente tiene que pagar más por sus casas. Este dinero de más que pagan, supongo que ira en parte a los políticos que manden en ese momento.