Manuel Rivas hace una lectura de los resultados de las elecciones municipales en Galicia casi triunfalista al tiempo que ataca la política nebulosa del PP para tapar y trastocar resultados: “En ese poniente, la izquierda gobierna también Vimianzo o Dumbría. Y es posible que Malpica, como gobernará todos los municipios de la gran metrópoli coruñesa, con excepción de Arteixo, que tiene un buen y liberal alcalde popular. No es correcta, pues, la imagen de una Costa da Morte con uniforme conservador. El disentimiento de muchos hombres y mujeres del mar se manifiesta en muchos otros municipios del litoral, como Rianxo, Boiro o Moaña, y el cambio sería histórico de no rapiñarse la izquierda votos con candidaturas fratricidas, lo que también fue el caso de Ferrol.” En cualquier caso creo que no puede negarse que hay decepción, que los resultados están muy lejos de lo que se esperaba, que sólo una esperanza no demasiado asentada hace pensar que en las autonómicas se confirme el cambio radical que, como mucho, ahora se ha apuntado.
La prestidigitación de Aznar y el caso Galicia.