Jayson Blair trabajo durante 6 años en el
New York Times y al parecer creó en ese tiempo todo un género periodístico: el reportaje falso. ” La productividad y los hallazgos de Blair sorprendían a sus editores. Quizá tanto que no tuvieron el cuidado suficiente para comprobar la exactitud de sus informaciones. El mes pasado una nota suya describía las cavilaciones de dos marines heridos en Irak que se recuperaban en un hospital militar cerca de Washington. Los diálogos, la decoración del cuarto de hospital, la ubicación del nosocomio, habían sido descritos con intenso detalle. Luego se comprobó que todo era falso. El reportero nunca se encontró en persona con esos soldados, las heridas que describió son diferentes a las que realmente tienen y ellos no recuerdan haber dicho las frases que les atribuyó.” Lo siento, pero no puedo evitar mi simpatía: que publiquen sus crónicas en un libro, por favor. De todas formas, la realidad hace tiempo que no existe.
El rubor de The New York Times, de
Raul Trejo Delarbre.