“Terenci ha sido uno de los escasos escritores españoles (salvando, tal vez, a Juan Marsé, aunque de otra forma) que supo o pudo convertirse en un mito. Fue siempre partidario de la mitomanía, del Hollywood de cartón piedra y de la Barcelona de los sesenta”.
Joaquín Marco homenajea su claridad de ideas y estética además de su prolífica actividad creadora.
Terenci Moix, ya, mito. De entre los grandes mitos cultivados, fue el del Egipto de los faraones el que más pasión le provocó en su vida, sus últimos deseos así lo confirman.
Forges le dedica su viñeta para cumplir con ellos.