Marco Rascón se disfraza de Sheherezada para contarle historias al Sultán Bush, aquí está una: “Una vez que llegó a oídos del visir del sultán, un tal Powell, que en un país pobre, vecino del imperio, se habían formado escudos humanos para impedir que murieran inocentes y Bagdad fuera destruida, mandó llamar a los súbditos jóvenes para enviarlos en calidad de misiles humanos. En Ciudad Juárez, que así se llamaba la frontera, miles de muchachos se enlistarían para destruir Bagdad a cambio de una pensión. Serían los primeros en caer en el ejército del sultán, pues no valían nada, sólo habían conocido la desesperanza. La bestia de la guerra sería alimentada con ellos.”
Las mil y una noches.
2003-03-12 17:05 ¿Es que nada ha cambiado desde que ejército de secesión envaba en primera fila a los soldados negros?