Largo post de recuerdo y repaso, nada correcto ni complaciente, a la obra de Lou Reed, que ayer moría en New York: Lou Reed: un poco de magia y algo de pérdida, por P. Roberto J..
«Si te los tomas todos en serio, te va a dar un patatús. Como si te lo tomabas en serio cuando le dio por salir a hacer yoga. Como los fans de Metallica (y los guionistas del Telediario de La 1) que insistís en tragaros el esperpento de Lulu sólo porque contaba con la aprobación y colaboración de Lou Reed, como si eso fuese ya, de inmediato, sello de calidad.
Y no, no era así: con él, como con cualquier mentiroso bromista, nunca te podías fiar. Lo mismo te daba el concierto de tu vida que, al día siguiente, querías matarlo por el aburrimiento, la tontería impostada y la pretenciosidad insufrible. Así era como funcionaban las cosas: en conciertos, en discos y en canciones.»