Sin duda está ahí para algo, pero ¿qué sabemos realmente de él? Marcus Hurst, de la mano de Jean-Luc Hennig, nos cuenta algo de la historia del culo
«El culo y el azote han tenido siempre “una intensa atracción mutua. Incluso podríamos hablar de flechazo. En efecto, ¿qué hay que sea más tierno, más pasivo, más ciegamente confiado, más consagrado a los golpes y a la oscura abnegación que el culo? En el fondo, la azotaina es al culo lo que la bofetada a la mejilla”, defiende Hennig.»