Creo que es bastante realista el triste panorama que dibuja Carlos Burges del mundo editorial y los libros de texto y su transformación al digital: El imposible viaje del libro de texto en papel al digital.
«Para las editoriales el gran problema de los libros es su “obsolescencia programada”, ya que un libro reutilizado es un libro no vendido. Así, cada año, hay variaciones en las ediciones de los libros de texto que justifiquen su compra, incluyendo ejercicios que han de rellenarse dentro del libro (con la esperanza de que queden automáticamente anulados), cambios en los textos, modificaciones a lo largo de todo el bloque de libros de texto para un cliclo, etc… para ellos, los libros de texto han de ser “obsoletos” de un año para otro porque necesitan de una razón poderosa para vender cada año una nueva edición.»