Se entenderá mejor qué está pasando en las fronteras mexicanas y cómo funcionan las mafias de la emigración leyendo la entrevista con el periodista Óscar Martínez: Migrantes: la industria del crimen.
«Los Zetas han llegado a tomar una modalidad en la que infiltran el flujo, meten a centroamericanos reclutados que van identificando quién tiene familia en Estados Unidos; quién, en lugar de comer en el albergue, sale y se come una torta en la calle, si manda dinero, si hace llamadas telefónicas porque alguien está pidiendo remesas, quién va a Western Union en el pueblito a sacar algo de dinero, y que es alguien a quien se le pueden sacar dólares. El problema es que han logrado generar una fractura interna en el flujo de migración, ya que han dificultado que incluso la solidaridad entre los migrantes sea algo viable.»