¿Y si volvemos a acercarnos a la música como adolescentes?. Gusten más o menos los nombres en cuestión, la reflexión de Javier Becerra es pertinente.
«Es momento quizá de volver a tener 14 años y entregarse a la música como entonces. Con la curiosidad, con la excitación y con el corazón, dejando a un lado toda esa “cerebralidad”, ese estar de vuelta de todo y esos dogmas que terminan en un callejón sin salida, a veces tan absurdos como aquel de Rockdelux cargándose el Kid A de Radiohead en base a que Autechre y otros grupos de la IDM ya había hecho esas cosas antes.»