“Suenan los tambores, se arman los tablados, se arremolina la gente para asomarse al corso. El viejo carnaval reaparece, olvidado de sus repiques míticos pero sumando toques de sucesivas generaciones (y administraciones municipales)”.
Rosalba Oxandabarat ya sabe que volverá a ocurrir, que la gente se dividirá a favor y en contra de El carnaval, por la mitología existente alrededor de la murga, por la voz del pueblo, por el teatro más popular, y la creatividad popular. Todos los años ocurre, en Uruguay y en otras partes del mundo dónde todavía hay espacio y tiempo para esta celebración.
Carnaval de luces o de sombras. El mundo al revés por unos días.