Tania Gisselbrecht nos habla de la polémica remodelación urbana que está sufriendo Estambul, unos cambios que han hecho saltar chispas entre la población. El hormigón, nuevo sultán de Estambul.
«Sin embargo, en una ciudad donde las plazas de esta envergadura son algo poco común, Taksim continúa siendo, sobre todo, un punto de concentración único para manifestantes de todos los colores políticos. De hecho, es habitual ver en la ciudad, y bastantes veces por semana, comitivas de manifestantes desfilando por toda la calle Istilkal que acaban desembocando en los adoquines de la plaza Taksim, lo que hasta cierto punto forma parte del ADN del ciudadano comprometido. Manifestantes del primero de mayo, aficionados al fútbol, estudiantes, nacionalistas, etc… todos aprecian el espacio disponible y la buena visibilidad que ofrece la explanada. »