Feminista, chavista, soberanista catalana y monja. Teresa Forcades no deja a nadie indiferente, y en esta entrevista habla —como es habitual en ella- sin ningún tapujo: En la Iglesia se palpan el clericalismo institucionalizado y la misoginia estructural
«No estoy de acuerdo con la gente que dice que sí a la espiritualidad pero no a la religión o a la institución, porque me parece que la espiritualidad no se puede vivir en solitario, pienso que ha de compartirse. Vivir la espiritualidad en solitario es una contradicción para mí. Y si la vives sólo con tus amigos, también es una espiritualidad demasiado cerrada. Y si quieres que te abra a los demás, algún acuerdo tendrás que establecer para ver dónde nos encontramos y a qué hora. »