Mariano Gistaín analiza con su particular humor y lucidez la inminente invasión de Irak, ese territorio que tiene como característica de sus habitantes el guardar bombas nucleares en el garaje y rellenar las botellas de vino con gas mostaza: “Educados en el protestantismo y el beisbol (aunque nunca hemos entendido las reglas de ninguno de los dos), somos conscientes de que lo más que podemos exigir a esa cuadrilla de gansters de los que formamos parte es que haya un buen guión, que mueran pocos extras y que en dos años se pueda ir a Nínive a comer hamburguesas para aprovechar algún puente.”
Bombas y bolígrafos.
2003-10-16 21:53 que porque no hay imagenes de organizadores, poruqe yo ahora mismo la neceito y no puedo, en ninguna pagina te vine, y es para un trabajo, intentralo poner.