Manel Carrasco cuenta algunos datos poco conocidos de una de las obras maestras más grandes de la historia del cine, La noche del cazador, de Charles Laughton. 15 claves que quizás no conozcas de ‘La noche del cazador’.
«En su búsqueda del perfecto Harry Powell el equipo pensó seriamente en Gary Cooper. Sin embargo, el héroe americano por antonomasia rechazó el proyecto por el riesgo que suponía para su carrera interpretar a un tipo tan miserable. No se puede ser el sargento York, o el honrado Will Kane, y después convertirse en un ogro que persigue a los niños. Cooper, de hecho, era un buenazo que no se rompía mucho la cabeza. Cuando supo lo que pasaba realmente en la “Caza de brujas” renegó de su participación en ella, de sus conexiones con el sector más conservador de Hollywood, e incluso fue la cara visible de una alegoría de la situación tan contundente como Sólo ante el peligro (1952). Para él las cosas estaban bien o mal, así de simple, y quizá Powell pedía un actor más matizado. Laughton definió a Cooper a la perfección: “Hay algo puro en él, y él no lo sabe. Realmente, este chaval no tiene ni la más mínima idea de lo bien que actúa”.»