La pistola de rayos energéticos de las películas de ciencia-ficcíón está aún lejos de ser realidad. Ciencia Kanija traduce un artículo de Sharon Weinberg que resume los desalentadores (pero costosos) avances del Ejército de Estados Unidos en este tipo de armas: Armas de microondas: Energía malgastada
«Las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos se han mantenido como principal patrocinador del programa HPM del país desde sus inicios. Al inicio, su objetivo era construir un arma capaz de desactivar los ordenadores enemigos, sistemas de comunicación y otros componentes electrónicos. En teoría, la idea sigue siendo convincente: una bomba electrónica, de ajustarse en las frecuencias correctas, desactiva sus objetivos sin daños colaterales. Los coches se pararían en la carretera, los radares quedarían ciegos y los ordenadores destruidos, sin necesidad de grandes cantidades de explosivos.»