Alfonso Armada cubrió en 1992 la guerra de los Balcanes para El País. Ahora podemos leer sus inéditos Diarios de la guerra bosnia. Primer cuaderno.
«El miedo de los otros oculta mi propio miedo. Un control de carreteras serbio entre Banja Luka y Bosanski Gradinska puede convertirse en una barrera infranqueable. Ser periodista es a veces como vestirse de diana. Tiro al blanco del que viene a meter las narices en el caldo del terror. Frente a la seguridad y a la obscenidad con que los milicianos exhiben sus armas, el temor y las palabras de los musulmanes bosnios. Uno puede disfrazarse de víctima, pero es más difícil ocultar el poder, la zafiedad, la violencia. Las casas acribilladas, bombardeadas, renegridas son un lamento a lo largo del camino que atraviesa la autoproclamada República Serbia de Bosnia-Herzegovina.»