Tómenselo como un piscolabis, pues se echa en falta un mayor desarrollo: Iñaki Berazaluce, Cinco fugas legendarias
«Ferrara, especialista en el robo de furgones blindados, organizó un comando de rescate propio de ‘Heat’. Sus compinches, ataviados con uniformes policiales, incendiaron un restaurante cercano a la cárcel para distraer a los vigilantes. Por si no fuera suficiente, dispararon ráfagas de AK-47 contra las torres de vigilancia, mientras el preso dinamita la reja de su celda de aislamiento, donde había conseguido ser trasladado para estar cerca de la salida. Toda la operación duró diez minutos.»