Feliz cumpleaños, Gabo. El mundo digital saluda la edición electrónica de Cien años de soledad. Winston Manrique Sabogal lo cuenta en Macondo se muda al ciberespacio
«Los agentes, asegura Balcells, “no podemos perdernos en el tumulto de los cambios en el mundo del libro. Tenemos que cuidar las ediciones electrónicas, no solo publicar sino contribuir a una mejor lectura en aras del placer de la misma”. Es lo que se busca con la metamorfosis de Cien años de soledad, a partir de este martes, cuando Macondo y los Buendía se enrumben en el universo digital y empiece a leerse desde allí ese rosario de historias de la humanidad contadas desde la frontera del sueño y la vigilia.»