Luis Racionero: “Y si, encima, los países ricos europeos apoyaran a Lula con avales y créditos, podríamos haber hallado de facto la tercera vía que sólo existe de momento en teoría. Cambios cuantitativos producen cambios cualitativos, ésa es la única forma permitida de revolución en el mundo actual del sistema único. Si se demostrara que ese sistema es lo bastante flexible como para alcanzar la solidaridad cuando los gobernantes desean aplicarla, estaríamos todos mucho más a gusto en el sistema.” Creo que si Lula logra convencer a Europeos y Norteamericanos que la jugada es convertir a 40 millones de hambrientos en 40 millones de consumidores, se pueden dar las condiciones para el cambio. Y por condiciones me refiero a esos avales y créditos, sí, pero también a la no-interferencia política (como en Venezuela).
Lula da Silva o el sentido común.