Un intento de perfil de la compleja labor de crítico, en concreto de Críticos de cine, por Javier Porta Fouz.
«“Querida señorita Kael, dado que usted sabe tanto del arte del cine, ¿por qué no usa su tiempo para hacer cine?” Esto es parte de un mensaje que le llegó a Pauline Kael en 1963, cuando hacía crítica en radio. La estadounidense Kael pocas pulgas, ingeniosa y veloz contestó, entre otras cosas: “Hay una respuesta estándar a esta vieja idiotez de si-usted-sabe-tanto-del-arte-del-cine-por-qué-no-hace-películas. Uno no necesita poner un huevo para saber si el huevo tiene buen sabor.” Y agregó:
Considero que la crítica es un arte, y si en este país y en este tiempo se practica con honestidad, no genera mayores ganancias que ser un cineasta de vanguardia. Mis queridos y anónimos oyentes que mandan cartas: si creen que es tan fácil ser crítico y tan difícil ser poeta, pintor o experimentador fílmico, les sugeriría que intenten ambas cosas. Quizás descubran por qué hay tan pocos críticos y tantos poetas.»