Que sí, que lo nuestro con los franceses es envidia global ancestral, y lo de los franceses con nosotros envidia, deportiva, moderna. Ramón Buenaventura recuerda la histórica relación de Francia ante la ridícula reacción oficial por las burlas sore el dopaje: Francia y otras frivolidades.
«Las relaciones entre España y Francia siempre fueron asunto sucio y enrevesado. Durante nuestros siglos de poder machacamos a los gabachos todo lo que pudimos, consiguiendo incluso la máxima humillación: tuvimos preso en Madrid, tras la batalla de Pavía, nada menos que a Francisco I, uno de los grandes reyes de la historia de Francia. El que manda, manda; y cuando deja de mandar, lo joden vivo, perdónenme la elegancia de la expresión. A nosotros nos han jodido vivos los franceses durante cerca de tres siglos.»