Carlos Serra Giráldez explica detalladamente cómo ha estado funcionando el sistema de primas a energías renovables en España y por qué los últimos gobiernos y el actual se están cargando esta industria: Sobre la Moratoria al Régimen Especial. Comentarios al RDL 1/2012
«Todo fue muy bien y España era de lo mejorcito en renovables hasta que un buen día muchos piratas echaron cuentas y vieron que la fotovoltaica tenía una tarifa similar a la alemana cuando en España se produce un 60% más de energía por contar con más radiación. Además el precio de los equipos ya no era tan alto. Surgieron empresas fotovoltaicas como setas para aprovechar el pelotazo. El objetivo planeado por el gobierno de tener 400 MW fotovoltaicos en 2010 se convirtió en 3.300 MW en 2008 a pesar de los avisos que las Comunidades Autónomas lanzaban al ministerio. Parece que nadie reaccionaba… y nadie reaccionó. Gracias a la desidia del ministerio de entonces, se coló una gran cantidad de potencia fotovoltaica a precios demasiado caros durante un solo año. Cuando el gobierno se quiso dar cuenta del error era demasiado tarde. En consecuencia, no se le ocurrió otra cosa que no asumir el error y cargar contra el sector fotovoltaico. Cerró el grifo a la fotovoltaica y se impusieron bajadas drásticas de tarifas (ahora sí, ¿no?, demasiado tarde…), cupos a la potencia instalada e incluso recortes retroactivos que supusieron la ruina de un prometedor sector y la pérdida seria de credibilidad de la marca España por la vulneración del principio de seguridad jurídica. Así es como un error de planificación de un gobierno se carga un sector exportador.»