Pues claro que me he acordado de qué día es hoy, cariño. De hecho he buscado este artículo solo para tí.
«El único superviviente fue el perro del almacén, gracias a que estaba atado lejos. Fue el que dio el aviso, el que atrajo la atención de los vecinos con sus interminables aullidos. En Chicago llamaba más la atención el gimoteo de un perro que una ensalada de tiros. »