No diga crisis, diga estafa. Lo propone Isaac Rosa y no podría estar más de acuerdo. Políticos al servicio de la mafia financiera. Y pensar que a Al Capone lo cogieron por un delito fiscal…
«Hago la prueba: cojo varias frases habituales y les aplico el cambio semántico. En vez de “Es la peor crisis en décadas”, lo dejo en “Es la peor estafa en décadas”. En lugar de “La crisis obliga a medidas dolorosas”, “La estafa obliga a medidas dolorosas”. Y no digo “La crisis exige reformas”, sino “La estafa exige reformas”. Incluso al “contrato de crisis” que se avecina lo llamo “contrato de estafa”. Pues sí que se ven las cosas de otra manera con el método Taibbi. Con más rabia.»