Al norte de Kenia hay una región que no sale en los telediarios pero que se muere de hambre igual, y con la misma impunidad, que otras más mediáticas: Turkana: la hambruna invisible, de Xavi Herrero.
«En otra habitación, Morani espera al médico. Está afectado de Leishmaniosis, una enfermedad que transmite un mosquito y que en los países desarrollados sólo se contagia entre los perros. Morani no tiene ni madre ni padre. A ambos los perdió cuando tenía 8 años a manos de los pokok, una belicosa tribu del sur de Turkana. Sólo le queda su hermana, quien cuida de él. Ella y los vecinos más próximos se encargan de darles de comer porque Morani ya no puede por sí mismo, la enfermedad lo ha debilitado demasiado.»