Cuando uno ve lo que hay al borde del abismo, ¿es necesario que muera? Escalofríos deja la despedida de Javier Pradera en su última columna de opinión.
« Porque la codicia de los mercados internacionales, la obstinación de Angela Merkel, las marrullerías en la sombra de Berlusconi y las incompetencias del resto de la eurozona podrían precipitarnos a los infiernos como hace un siglo. La capacidad del mundo de avanzar hacia el abismo y sumergirse en sus honduras parece marchar en contra de las posibilidades racionales; sin embargo, hace un siglo sucedió algo muy parecido.»