Las protestas internacionales no han tenido mayor efecto para el tribunal que rechazó la apelación del cineasta Jafar Panahi acusado de violar la seguridad nacional por realizar películas contra la República Islámica de Irán y condenado a seis años de prisión. Ahora Panahi llevará su caso hasta el Tribunal Surpemo iraní. No pintan bien las cosas para él ni para la libertad de expresión.