“No olvido cómo empezó 2002: con las manos acostumbrándose al tacto del euro, que se nos escurría en los bolsillos, casi sin saber cuánto teníamos y menos aún cuánto dejábamos de tener”,
Cecilia García repasa los recuerdos que sin duda permanecerán de este año que termina fundido de negro chapapote y con anuncio de guerra:
¿Año nuevo?.