Pues sí, todos iguales. Tómenlo no sólo como puro conocimiento de lo cotidiano, sino como un subterfugio para ser pedante —en el sentido de erudito— si se le escapa a uno: ¿Por qué se producen los pedos?, por Ángel Rodríguez Lozano.
«Estas bacterias son verdaderas “fábricas de gases”, especialmente si les proporciona ciertas sustancias que llegan si digerir totalmente hasta el intestino grueso y son utilizadas por ellas. Hablamos de alimentos ricos en azúcares. Tiene una fama bien merecida la familia de las judías o habichuelas, ricas en ciertos azúcares de difícil digestión llamados oligosacáridos. No menos importantes son: la leche, que contiene lactosa, un azúcar de difícil digestión para algunas personas; el sorbitol, muy utilizado para endulzar comidas bajas en calorías y en los chicles, y la fructosa, un azúcar natural abundante en las frutas y ampliamente empleada en caramelos y golosinas. Otra sustancia particularmente activa como origen del gas producido por las bacterias es el almidón, que está formado por largas cadenas de azúcares y abunda en las patatas, el repollo, el trigo o el maíz.»