Pues sí, asistimos a El mundo al revés, nada nuevo, pero sí quizás de un modo más intenso, como destaca Oscar Guardiola-Rivera.
«A nadie se le habría ocurrido hace unos años que la salvación del capitalismo global estaría en manos del comunismo chino. Se habrían reído de nosotros si hubiésemos predicho la bancarrota de los Estados Unidos. Afirmar que Argentina es un ejemplo a seguir en materias de economía y deuda habría sido descalificado como una locura. Que el próximo ataque terrorista no vendría del fundamentalismo musulmán sino del europeo, una herejía. Y que en Colombia se fortalecería un centro político ampliado en el que caben la derecha y la izquierda racionales, pero no los extremos, una fantasía.»