Yolanda Gándara entrevista a la fotógrafa artística Ouka Leele sobre sus últimos trabajos y su carrera en general. Ouka Leele: pasen y vean.
«Cuando empecé buscaba el encasillamiento, el estilo, la firma, el reconocimiento absoluto de mi obra, que sobresaliera por encima de cualquier cosa y se supiera que era mía y lo conseguí enseguida. Cuando empecé a colorear las fotos era un sello de identidad, pero también estaba contando cosas, eran escenografías; eso el público más lejano no lo veía, porque a lo mejor se quedaba con una foto que veía en una revista, pero no iban más allá. Luego empecé a exponer las fotos en blanco y negro, desnudas, y se ve mucho más mi trabajo, lo que yo estoy contando. Es pura literatura, puro cine o teatro. Me he ido liberando del estilo, que era una cosa impuesta en la juventud para que se supiera que estaba ahí. Sinceramente: yo no aguanto el estilo. No sé si la gente que lo lleva a través de los años es sincera consigo misma, pero para mí era algo insoportable. Llega un momento en que tienes que probar otros materiales, salir de lo que todo el mundo te pide, necesitas volar, respirar, ser persona. Ahora estoy absolutamente en contra del estilo, pienso que un artista es libre y su sello está en su forma de ser. Siempre se te reconocerá cuando andas por tu forma de andar, y en tu obra se nota quien eres, no hace falta ningún esfuerzo.»