Curiosas coincidencias, contradicciones, paradojas o burlas del destino que sufrieron o señalaron insignes del pasado recopiladas por Vicente Luis Mora.
«Hipócrates, aunque curó muchas enfermedades, enfermó y murió. Los caldeos vaticinaron la muerte de muchos y también a ellos les alcanzó el destino. Alejandro, Pompeyo y Cayo César, que arrasaron ciudades y aniquilaron ejércitos, también ellos murieron. Heráclito, después de investigar incansablemente sobre la ignición del mundo, murió hidrópico. Demócrito y Sócrates se agusanaron.
Marco Aurelio, Meditaciones, III,3.»