Estupendo este texto de Noel Ceballos analizando el revuelo que se ha producido en Cannes porque Lars Von Trier ha hecho un chiste y el festival se ha descubierto sin sentido del humor. La ciencia de la risa.
«Como hipótesis de partida, digamos que a nadie le gusta que le hagan cosquillas. Pero, aún así, todos nos reímos. ¿Por qué encontramos gracioso algo que, sobre el papel, es una violación de nuestra intimidad? Porque percibimos que es benigna. Es fundamental que se den esos dos elementos: si uno se intenta hacer cosquillas a sí mismo, no hay risas porque no hay violación; si un viejo con gabardina que nos encontramos en el metro nos intenta hacer cosquillas, no hay risas porque sus intenciones no son benignas. En cambio, aunque nos resistamos a las cosquillas de nuestra pareja, al final siempre nos rendimos y, por tanto, nos reímos. Para McGraw, todos los tipos de humor imaginados por el hombre responden al modelo de la Violación Benigna: en un trabajo citado en el último número de la revista Wired, el profesor pone como ejemplos violaciones “de la dignidad personal (slapstick, deformidades físicas), de las normas lingüísticas (acentos inusuales, malapropismos), de las normas sociales (comer de un orinal, comportamientos extraños) e incluso de las normas morales (zoofilia, comportamientos irrespetuosos)”.»