Vicente Romero sobre Stéphane Hessel y su llamada a la indignación como catalizadora de cambios profundos en este sistema semipodrido: Indignación.
«Stéphane Hessel llama a la indignación como motor de la protesta, ante el enriquecimiento amoral y la impunidad de los responsables de una crisis cuyas facturas pagan los sectores más débiles, y frente al abismo de la desigualdad entre pobres y ricos en un planeta sometido a una sobreexplotación de recursos insostenible. A sus 94 años este antiguo miembro de la resistencia contra los nazis, que fue uno de los redactores de la Declaración Universal de Derechos Humanos, alza su voz en el enorme vacío ético causado por quienes Jean Ziegler denomina los nuevos amos del mundo: las grandes corporaciones financieras internacionales. Y su eco resuena en un ambiente de inquietud ciudadana generalizada, ante la amenaza de recorte y desaparición de algunos logros sociales que se alcanzaron en Europa durante la segunda mitad del siglo XX.»