Van a encontrar ustedes cierto hermetismo en este artículo de Cayetano Lupeña en torno al sentido del humor y los intereses comerciales. Parte de una anécdota: la irrupción de Jimmy Jump en la gala de los Goya y el insulto que el presentador le dedicó: Humor sin límites: culo, caca, pis.
«Algo similar sucede en Internet, bien sea utilizando Twitter, un blog periódico digital, etc. Cuando un personaje destacado (es decir con muchos seguidores) dice una gracieta que molesta a determinados colectivos (víctimas del holocausto o del terrorismo, enfermos de cáncer, homosexuales, discapacitados físicos o mentales, tontitos y cosas así.) se le echa encima la Justicia, o su empresa le despide, o los patrocinadores le retiran los fondos, porque se arma la de Dios es Cristo. Los graciosetes se llevan las manos a la cabeza diciendo: No vamos a poder hacer humor ni reirnos de nada. Es decir, que, cuando les joden el invento, reaccionan como Buenafuente y dicen: Sois imbéciles. Yo les digo, es que no habeis entendido el chiste. Os ocurre como a Buenafuente: Alguien os está gastando una broma y no la entendeís.»
2011-02-25 19:08
Nota para no iniciados: Parte del comentario es MUY irónico.
Aprovecho que es viernes y la mayoría de los visitantes habituales inician escapada fin de semana. Mi hermetismo tiene que ver con el mal hábito de lidiar con la censura
Esto es, para mi, un ejemplo de humor estilo La Codorniz pero en pleno siglo XXI. ¿Demasiado hermético? :-)
Gracias por la referencia. (Aquí no hay ironía)