Cristian Valencia escribe sobre siete puentes semiabandonados que cruzan un río en Colombia: Tristes puentes de la Guajira. @alvaro_llorca
«Los puentes pertenecen tanto al imaginario que nadie los recuerda con precisión en Riohacha, como nadie recuerda un trupillo en especial, ni un cactus. Pertenecen al paisaje. Parecen una intervención plástica de un renombrado artista que quiso evidenciar con esta humilde acción el abandono tan contumaz en el que se encuentra la portentosa península que define el norte de Suramérica. Una obra que hubiera podido darle la vuelta al mundo porque parece de la misma estirpe que las esculturas de Frans Krajcberg, el polaco-brasileño que hace bosques artificiales con árboles muertos; o las de Christo Javacheff, quien alguna vez empaquetó unas montañas.»