Ya saben que el Partido Popular ha sugerido cual globo sonda o aviso que el estado de las autonomías español no se sostiene y hay que cambiarlo (¿eliminarlo?). Armado de altruísmo y buen humor, Otis B. Driftwood les regala (al PP y a ustedes) 17 propuestas para la reforma del estado autonómico.
«7. Cantabria: Visto el empeño de Revilla, cambiarle el nombre a “Anchovia” e inundarla para convertirla en terreno de monocultivo de la especie, dejando las tres o cuatro ciudades principales como islitas, para turismo exótico y lonjas.
8. Euskadi: vamos a darnos cuenta ya de que la idea ibarretxiana3 del estado libre asociado no era en el fondo tan mala, y concedamos a los vascos-vascos ese estatus. Nombrar inmediatamtente antes tres lehendakaris, uno para Vitoria, otro para Bilbao (margen derecha) y otro para Donosti. Ya sé que esa triplicación puede parecer mucho más onerosa, pero piénsenlo: a partir de ahí empezarían a pedirse transferencias y conciertos económicos entre ellos, descargando al gobierno central del perpetuo coñazo. Es más, con suerte empezarían a pedírselos a Francia.
9. Navarra: nacionalizar el Opus. ¿Qué más medidas quieren?»