Irlanda no sólo no debe aceptar la ayuda de Bruselas sino que debe abandonar una UE a la que nunca debió unirse. Es la tesis que sostiene Mike Whitney en Cuando la cura es peor que la enfermedad: el pacto suicida de Irlanda con la Unión Europea
«No está solo Osborne en la idea de que Irlanda comete un error permaneciendo en la Unión Europea. El columnista del Telegraph Ed West ve las cosas de la misma manera, pero describe la alianza UE/Irlanda en términos todavía más sombríos, como un “pacto suicida”:
“Irlanda siente una atracción histórica hacia Europa continental como liberadora del yugo británico, pero el vínculo es tal vez aún más profundo, remontándose a los monjes que preservaron la civilización occidental durante las épocas obscuras. Irlanda, más que la mayoría de países, se siente profundamente europea, y su catolicismo fue siempre una parte de eso. No es pura coincidencia que cuando el catolicismo comenzó a declinar, Irlanda adoptara una ideología substitutiva, el sueño de Bruselas. O el pacto suicida más enorme del mundo, como creo yo…
“¿A qué empeñarse durante 800 años en sacudirse el yugo británico para terminar bajo la espada de la UE? Dicho esto, nadie en Irlanda va tan lejos en la oposición a la UE como el UKIP [Partido por la Independencia del Reino Unido] o muchos conservadores tories…“»