“Lo que conviene es fortalecer partidos con tendencias diversas en su seno e instalar un gobierno pluralista mediante convergencias sobre un interés nacional interclasista, así como saturar el Congreso con diputados de probada honestidad, haciendo del mismo un espacio de ejercicio real de la democracia.”
Mario Roberto Morales escribe sobre el fracaso de los neoliberales y el alza de la izquierda, o algo así, en varios países.
Ola antioligárquica en América Latina. Tengo la impresión de que cuando se dice democracia real, se manifiesta una extrema radicalidad: que podamos considerar a los otros como iguales.