Se centra el Colectivo Baltasar Gracián en los efectos de la crisis en el sistema educativo, y aporta razones para ir a la huelga el próximo 29: La educación y la huelga general.
«No sabemos qué ha sido de aquellos 1.500 millones adicionales que el Ministro Gabilondo ponía sobre la mesa para llevar adelante las propuestas del Pacto Educativo. Decía hace sólo unos meses que, a pesar de no lograr su firma, las “medidas de mejora” de mayor consenso se llevarían adelante. Ya nos conformaríamos en los centros escolares que, aunque no hubiera “mejoras”, se hubieran mantenido las condiciones de años anteriores.
El gobierno dio ejemplo con los las restricciones del gasto público (ajuste) y el ataque a los funcionarios (extendido a todos los trabajadores públicos): todo compromiso, acuerdo o convenio puede ser roto. Cada gobierno autónomo aplica la misma receta a su manera. Como era de esperar, Esperanza Aguirre quiere hacerse notar en eso de ir más lejos que nadie.
Pero la política de recortes a discreción se aplica en todas partes. En los datos publicados con el inicio del curso se resaltaba que hay 140.000 alumnos más en la enseñanza pública (producto de trasvases de la privada no subvencionada) y 6.400 profesores menos, sin tener el cómputo de todas las comunidades. En Madrid, según datos recogidos por directores y sindicatos, se habla de 2.500 profesores menos, repercutiendo en primer lugar en las contrataciones de interinos, pero también en grupos masificados, menos apoyo para los alumnos con dificultades, más horas lectivas para el profesorado, relegación de acuerdos como la disminución de horas lectivas para los mayores de 55 años, etc. De cara a los alumnos, han desaparecido sin más itinerarios de transporte escolar, becas de comedor o de estudios, etc., y, para el profesorado, las licencias por estudio remuneradas, parte de la indemnización por jubilación, las vacaciones de los interinos, etc.»