Enrique Dans cuenta cómo la decisión de compartir la información libre de autoría o derechos generó una cantidad ingente de estudios en torno al Alzheimer: Alzheimer y propiedad intelectual.
«Cinco años después del comienzo de la iniciativa, los resultados saltan a la vista: múltiples compañías e instituciones han contribuido con sesenta millones en fondos al proyecto, ha sido más sencillo obtener pacientes con los que desarrollar pruebas, se ha generado un conjunto de más de ochocientos pacientes y controles, el archivo de datos ha sido descargado más de tres mil doscientas veces, y la base de datos con imágenes de los escáneres cerebrales, en casi un millón de ocasiones. El esfuerzo ha dado lugar a una gran cantidad de papers de investigación, y a más de cien estudios en progreso sobre fármacos que podrían ralentizar o detener la evolución de la enfermedad.»